ENFOQUE ‘SMART CITY’

Soluciones innovadoras para diferentes realidades

Por Lucía Bellocchio*

Directora de Trend Smart Cities**

Con la continuada y creciente tendencia de migración a grandes ciudades, el diseño urbano cobra especial importancia. A medida que generamos más y más datos en los conglomerados, y mientras las ciudades continúan expandiéndose, resulta indispensable ocuparnos y preocuparnos por cómo optimizar la gestión urbana.

Para comprender lo delicado de la incubación de iniciativas con impacto en lo urbano, hay que tomar en cuenta que las ciudades que diseñamos hoy luego modelan nuestras vidas. Es decir, se corrobora una relación dialéctica entre los seres humanos y las ciudades: nosotros las diseñamos y luego las construimos; pero una vez viviendo en ellas, nuestra vida se ve determinada por eso que anteriormente pensamos y materializamos.

Visto así, queda claro que nuestra relación con las ciudades es simbólica, narrativa. Es decir, imaginamos, dibujamos, maquetamos y ejecutamos la materialidad del espacio que habitaremos. Aunque, las ciudades, una de las creaciones más grandes de la humanidad es tierra de oportunidades pero también de varios desafíos: emergencia climática, problemas habitacionales, pobreza, congestiones de tránsito, entre muchísimas otras.

¿Cómo hacen hoy las ciudades para dar respuesta a la creciente urbanización y los evidentes desafíos urbanos?

Aquí entra en acción la premisa de las ciudades inteligentes -o ‘smart cities’, que buscan a través de la innovación y la tecnología, generar un mayor bienestar en las poblaciones urbanas. En contextos diversos, éstas se utilizarán para potenciar diferentes soluciones. Tanto en sociedades donde existe un alto desarrollo de infraestructura, como en aquellas donde la falta de acceso a servicios básicos genera desigualdad social, una gestión inteligente es necesaria para planificar un crecimiento sostenible y respetuoso de las personas y el ambiente.

Se estima que actualmente el 55% de la población mundial vive en ciudades y que, para el año 2050, ese número llegará al 70%. Ante este escenario, pensar en la transición hacia smart cities, como respuesta a los actuales desafíos urbanos, deja de ser una opción para convertirse en un tema impostergable. Los desafíos que los entornos urbanos presentan crecerán y se profundizarán con el aumento de la densidad poblacional y el fenómeno de la urbanización.

El impacto en el ambiente, la propagación de enfermedades, la necesidad de movilidad, de acceso a servicios y el ejercicio de los derechos ciudadanos deben formar parte de la agenda de los gobiernos. Si no existe una planificación que tenga en cuenta estos aspectos, el crecimiento de las poblaciones, heterogéneas y con necesidades diversas y cambiantes, creará contextos cada vez más complejos.

El enfoque ‘smart city’ propone integrar tecnología, datos y políticas públicas para responder a los escenarios urbanos y dinámicos de forma planificada y eficiente. En aquellas ciudades donde la población tenga sus necesidades básicas garantizadas, el foco estará puesto en aumentar la eficiencia de la infraestructura existente. Mientras que, en ciudades donde la brecha social es marcada, el eje pasará por generar la información necesaria para crear servicios que resuelvan las necesidades prioritarias de sus habitantes.

En todos los casos, la interdisciplinariedad, la alianza entre gobiernos y organizaciones privadas y la participación ciudadana deben ser los pilares a partir de los cuales se creen políticas públicas y se establezcan las prioridades de inversión y desarrollo. Una planificación inteligente que integre estos actores sociales podrá atender las prioridades y desafíos de la población.

Nuestra experiencia nos enseña que las soluciones no pueden replicarse como respuestas rígidas a espacios diferentes. Si los entornos urbanos son espacios vivos, diversos y en constante transformación, las respuestas a sus necesidades deben apoyarse en las innovaciones disponibles para crear soluciones que detecten el ADN de la ciudad y, inspiradas en un ‘mindset innovador’, realmente sean pensadas medida.

De esa forma, en vez de temorizarnos por el avance de las tecnologías, podemos ver como estas pueden tornarse aliadas de nuestros entornos y generar un impacto positivo en sus diferentes realidades y prioridades. Así podemos intuir que a las ciudades las esperan tantos futuros como cuántas de ellas hay en el mapa. Ver su proliferación y sus metamorfosis sigue siendo apasionante, aún cuando la tecnología tienda a universalizar ciertas gramáticas.

Quizá lo único innegociable sea el bienestar de quienes habitamos en ellas.

*Directora de Trend Smart Cities. Directora de la Diplomatura en Smart Cities de la Escuela de Gobierno de la Universidad Austral. Miembro del grupo de expertos de United for Sustainable Smart Cities (ITU-ONU). Columnista de La Nación y speaker internacional.

**Trend Smart Cities es una consultora especializada en ciudades inteligentes que brinda asesoramiento y capacitaciones a sector público, organismos multilaterales, empresas, inversores, startups, emprendedores. Ver más en: www.trend-smartcities.com